sábado, 5 de agosto de 2017

Arcade Fire : Everything Now (2017)

"Carente de magia..."

Con todo esto del cambio de paradigma dentro de la industria musical, el auge de internet, la muerte del video clip o la radio como medio de difusión y la lenta pero segura extinción de los dinosaurios, algunos han caído en desesperación. Y no los culpo. El mundo que conocimos, todos aquellos que sobrepasamos los treinta y tantos años de edad, poco ha poco ha comenzado a dejar de existir. En ocasiones la muerte, cruel e insensata, ha anticipado sucesos, arrebatándonos de manera brusca a personajes que aún se encontraban en activo pero en a veces ha sido el inevitable paso del tiempo el que ha ido recordándonos que tarde o temprano enormes de la música como U2, The Cure, Iron Maiden, ACDC o más recientes como Pearl Jam o Radiohead, dejarán de existir... y, frente a la ausencia de relevo, la responsabilidad de sostener la bandera del rock inevitablemente ha recaído en bandas que durante estos años se han anotado uno o dos discos notables, como es el caso de Arcade fire.

Los canadienses cosecharon buenas críticas y reconocimiento a partir de sus primeros tres álbumes, Funeral (2004), Neon bible (2007) y el enorme The suburbs (2010), instalándose así de golpe en un sitial privilegiado dentro de la escena, digamos, como unas de aquellas agrupaciones que uno creía convertirían en diamante cualquier piedra rocosa. En aquel camino, sin embargo, un disco como Reflektor (2013) llevó a muchos a arquear la ceja. Un disco (innecesariamente) doble, de momentos excesivos y pretenciosos pero que de todas formas nos dejaba cosas como 'Afterlife', 'We exist', 'Normal person' o la mismísima 'Reflektor' como para seguir creyendo en ellos. Esta vez, cuatro años más tarde, nos la han dejado más difícil aún, Everything now es lo más bajo que Arcade fire han entregado a la fecha, y por paliza...

Hay algo que escasea en este álbum: la magia. El tiempo dirá si a causa de una falta de ideas, estancamiento creativo o mera comodidad, Arcade fire se ha instalado en un prototipo de canción que no acaba llegando a ningún lado, que carece de intensidad. Ahí, ya sea desde el coqueteo pop/dance o las guitarras, todo funciona a medias. Dentro de los temas que pretenden ser fuertes en el álbum, destacable me parece la partida con 'Everything now' (la canción), para mi, una jugada brillante y adictiva pero que lamentablemente no encuentra relevo en ninguno de sus pares. 'Signs of life', por ejemplo, posee arreglos contagiosos pero es tan repetitiva que al minuto y medio de canción ya ha mostrado absolutamente todas sus cartas, 'Creature comfort' presenta potentes estrofas pero también se empantana en la pérdida de dirección, es un tema que cuanto intenta explotar se encuentra con unos coros espantosos (repito: espantosos) de Reginne Chassagne enterrando cualquier chance de emoción. 

Ahora, dentro de las canciones menores, 'Peter pan' o 'Infinite content' se instalan como esos típicos temas breves de la banda cuyo único objetivo parece ser el rellenar mientras que 'Chemistry', 'Electric blue' o 'Good god damn' algo tienen, un coro atractivo, arreglos delicados o una melodía bonita, pero ninguna te aplasta, ninguna se impone, siendo la hermosa estructura de 'We don't deserve love' el único momento en todo el álbum en donde reconocemos esa alma, ese sentir o esencia que alguna vez nos enamoró de esta banda...

Con el paso del tiempo la carrera de Arcade fire ha ido perdiendo fuerza pero a esto me parece habría que restarle algo de dramatismo: es natural. Ahora, si el estancamiento es momentáneo o definitivo, el tiempo dirá. Sus primeros gloriosos álbumes siempre quedarán ahí, registrados con letras doradas en la historia contemporánea, pero claro, lentamente comenzamos a mirarlos con cada vez más nostalgia, algo dramático considerando que no ha pasado demasiado desde ellos...

¿Canciones? 'Everything now', 'We don't deserve love'.

5/10
Nada muy especial...


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